lunes, 29 de junio de 2015

Nunca creí que iba a llegar un día donde se derrumben todos mis sueños, ni siquiera logro caer por que nunca me esperaba una respuesta así, ni mucho menos. Siempre pensé que si bien era una pelea más, había un que esperar a que se pusieran las cosas en su lugar. Pero y es una palabra que me viene a cada segundo a la cabeza.
Para cada momento, y decisión que vamos tomando existen dos caminos. El “olvidar” o el “seguir adelante” para cualquier momento en donde se nos complique tenemos que elegir alguna de las dos pero, yo me veo en un punto fijo donde nunca pude elegir una sola, siempre trate de unirlas y de eso hacer algo. Como dejas de un día para el otro algo que te hace querer levantarte todos los días? Un motivo para ser feliz, un motivo que te enamore, y más si un motivo es una persona. Más motivos si es el amor de tu vida? No creo que haya. Me quedo con unas palabras de alguien de hace como dos años “"Dicen que si no puedes dejar de pensar en alguien, al menos una vez al día, no debes renunciar a esa persona" Y acá estoy, no hay un solo día en donde no me acuerde de su cara, su espalda sus ojos profundos diciéndome que todo va a estar bien, diciéndome “te amo” y acá estoy sabiendo que es el hombre que quiero para mí, y para mis hijos porque por más errores, lo que yo siento es amor; y todavía no existe acto que me haga pensar lo contrario.
Si tal vez todo esto es una locura más como hace 4 años atrás, y si solo es una obsesión y es pasajero, no lo sé, pero de lo que estoy segura es que por más distanciamiento que haya y estemos en dos puntas totalmente separamos uno del otro, lo voy a seguir sintiendo acá adentro, y fuerte. Eso para mí es el amor; llorar, reír, extrañar, enloquecer, y enloquecer feliz por una persona la cual me gusta. El día que ya no lo sienta, ahí voy a saber que era pasajero, o que tal vez fue una persona más en mi vida, que no fue mi gran hombre.
Por eso me dicen que basta, que haga mi vida y no espere; tienen toda la razón, no voy a esperar a que mañana me hable, o pasado, o en una semana incluso, solo voy a esperar a que me extrañe y me quiera sentir cerca si es lo que a él le hace tan bien como a mí. Ese es mi tiempo hoy. Esperar a que se calme esto, tanto enojo, tantas confusiones, solo eso.
Mi respuesta ya la tengo, si quiero puedo ser feliz con otra persona, elegir otros cuerpos para tener un poco de placer por algunas horas, besos y abrazos pasajeros, y él también lo puede hacer. Pero ese es mi punto final, ahí dejo de sentir lo que es para mí.  No quiero que llegue ninguno de esos dos días para ninguno de los dos, solo voy a esperar no esperándolo. Solo voy a seguir con mis proyectos, con mis amigos, riendo, saliendo, siendo la que siempre fui, pero pensando en él y lo hermoso y completo hombre que es para mi vida. Respetando este tiempo, y aunque el me lo pida y enojado me diga que me olvide de él, voy a darle su tiempo, espacio y que haga su vida como si no estuviera.
Este es mi “olvidar” olvidar que estamos juntos, que nos vemos, que nos besamos, que nos celamos, pero mucho más es mi “seguir adelante” recordando que fuimos, somos y tengo mi fe que seremos, que aunque no me vea, no nos veamos, yo lo siento; que aunque no nos besemos, todavía siento su boca, sus brazos enorme que me protegen de todo, su espalda que me dice te voy a cuidar, su calor que me vuelve loca y al mismo tiempo me hace tocar el cielo con las manos; aunque no nos celemos, él va a ser el más importante, el primero en mi vida, dueño de esto y todo, y yo me siento dueña de lo que es mío, de lo que convertí mío. Y más que nada, mi mayor motivo a “seguir adelante” es darle espacio para que si volvemos en lo cual hoy confió, no vuelva a pasar. Que haya errores, pero juntos aprendamos a equivocarnos y que este el otro ahí. “seguir adelante” por su dolor, por el mío, por el amor eterno que le jure en una esquina con apenas 16 años, seguir por su sueño y ya mío de verlo jugar, por ellos tres que ya los siento nuestros, y seguir por todo lo que me hace sentir, al único que confió mi vida con los ojos cerrados, con esa hermosa boca que me de el último beso de mi vida, por el juntos, por mi amor, voy a seguir.

Olvidar los errores, hacer que no sucedan más, darnos espacio y tiempo hasta que me demuestre lo contrario, hasta que no lo sienta ya mío; y “seguir adelante” por lo especial que es para mí, por el amor que hizo sentir, por conocerme y dejarlo conocer. Seguir para cuidarlo, protegerlo, respetarlo, hasta que la muerte nos separe quien es la única que va a lograr que me aleje de su lado, hasta mi último dia.